lunes, 29 de noviembre de 2010

Esclavos en Agudo S.XVI y XVII

La esclavitud durante el periodo medieval está ligada a la pugna cristiano-musulmana, los cristianos son esclavizados por los musulmanes y éstos por los cristianos. Esto también constituye una vía para la entrada de los negros como esclavos en España, ya que eran una fuerza militar o esclavos en la sociedad civil.

Durante el siglo XVI la esclavitud estaba ligada en las Indias con la explotación económica, y en Castilla  se presenta como algo exótico, como una muestra de riqueza de sus propietarios, y no se relaciona, en general, a los esclavos con trabajos concretos y si con que su actividad se realizaba en el ámbito doméstico de sus propietarios.

La abundancia de esclavos durante ese periodo hay que ubicarla dentro de un contexto de expansión demográfica y económica, siendo la frontera de Portugal la principal vía de entrada, sobre todo a raíz de su anexión a la Monarquía Hispánica en 1581. Pero los portugueses no fueron los únicos que aportaron mano de obra esclava, también aparecen esclavos proporcionados por las victorias militares en el Mediterráneo y los moriscos esclavizados como consecuencia del levantamiento de las Alpujarras  (1569-1571).

Los esclavos formaban parte de una minoría marginada de la población, donde no aparecen mencionados en censos ni padrones, y solo aparecen documentados en algunas fuentes como son las fuentes notariales (escrituras de venta y poderes para vender esclavos, testamentos, dotes, inventarios ...) .Estos documentos son vitales para entender como se desarrollaba el tráfico de esclavos, pues nos ofrecen datos relativos a compradores y vendedores: sus nombres, vecindad y a veces su profesión; también presentan descripciones físicas de los sujetos como son sexo, edad, color de la piel, procedencia.. También se puede conocer el precio alcanzado por la compra-venta del esclavo.

En los testamentos, los esclavos suelen aparecer registrados entre las posesiones del otorgante, determinando su destino tras la muerte de su propietario. Así son legados a parientes o se les concede la libertad de forma total o condicionada.

Las fuentes eclesiásticas constituyen otra fuente de estudio, a través de los libros sacramentales, como es el caso de Agudo, donde relataré los esclavos que he visto registrados en los libros de Bautismos y Defunciones (hasta el momento).

También están las fuentes jurídicas ,las fuentes inquisitoriales y las fuentes municipales.

Parece ser que en la zona meridional de Extremadura y Campo de Calatrava, estuvo extendido el empleo de mano de obra esclava para todo tipo de faenas, tanto las domésticas como las agropecuarias.

Según algunos autores, las esclavas era poseídas, en numerosas ocasiones, para ser nodrizas de los hijos de sus dueños, circunstancia que requería el que se quedaran preñadas con algunos meses de antelación a sus respectivas propietarias para que cuando naciera el hijo de estas ellas pudieran proporcionar la lactancia desde el mismo momento de su nacimiento. Hecho que se aprecia con el nacimiento de un hijo de Gonzalo Rodriguez y de su mujer Isabel Muñoz en 1608. 

Otros autores también creen que el propietario hacía uso biológico de la esclava para obtener nuevos esclavos. Los esclavos que aparecen en los libros de Bautismos y Defunciones desde 1553 a 1630 son los siguientes: 

Propietario Esclavo Madre Esclava Año
Andrés García Redondo Inés
Juan
Isabel
Catalina
1553
1570
Álvaro Pizarro Francisco Agudo
1556*
Bachiller Yegros Juan (liberado en 1581) Isabel 1561
Licenciado Fuentes Juan Catalina 1561
Bartolomé Luengo María
Catalina
Ana
1565
1574
Gonzalo Muñoz de Carvajal, Gobernador de la Villa Isabel Inés 1570
Juan de Villareal Baltasar
Gaspar
criado 1572
1574
Padre Pedro Gómez Juan Catalina 1573
Aparicio Martín Luengo Miguel
Isabel

1573
1577
Juan Lorencio María criada 1575
Pedro Mellado María
Juan
Inés
1575
1578
?? María
1575
Bachiller Pizarro Alonso María Alonso, Criada 1577
Padre Prior Juan Isabel 1584
Juan Luengo Alonso Catalina, criada 1587
Antonio ??? María
1591
Bachiller Francisco García Madroñero, clérigo María María de Quintana 1596
Gonzalo Rodriguez , Portugués Bernardo
Agustina
Maria
María
Felipa Madera

Felipa Madera
1608
1610
1611
1618
Andrés Camacho Camarero María Morena
Juan
Lorencio, Sebastian y Francisca
Francisca
1605
1609
Vecindario 1610
Francisco Serrano Juan, Diego, María
María
Jacinta

Vecindario 1610
1619 - † 1637
1610 - † 1639
Álvaro Núñez María
Vecindario 1610
Martín Sevillano María Felipa Madera * 1611
Doctor Juan de Yegros y Doña Catalina su mujer Isabel y Antonia
María
Juan

Antonia
Vecindario 1610
1613
1616
Doña Beatriz, viuda Doctor Alonso Luengo Juan Francisca 1615
Pedro Sánchez Camarero Pedro
Vecindario 1619
Álvaro Pizarro Juan Latino
† 1626
Juan del Burgo Catalina, Antonio
Inés
Sebastián

Lucrecia
   
Vecindario 1619
1628 - † 1629
† 1629


Los propietarios solían ser clérigos, hijosdalgo y personas relevantes (Doctores, mercaderes..)

Destacan las madres : Francisca, Isabel ,Catalina y Felipa Madera. En otros no tenemos el nombre de la madre, pero Felipa Madera es la madre de los tres esclavos de Gonzalo Rodriguez y de otro de Martín Sevillano.

En el caso de Alvaro Pizarro, ya aparece en 1556 como propietario de Francisco Agudo, y más tarde, un descendiente suyo es el propietario de Juan Latino.

He dejado varios casos de hijos de criados que podrían ser también esclavos.

Procedencia y raza

No sabemos la raza ,ya que este dato no aparece en los registros que he consultado. Los denominados esclavos blancos eran , en general, musulmanes, entre los que se contaron muchos moriscos granadinos tras la guerra de las Alpujarras. Muchos de ellos recuperaron su libertad tras pagar un rescate; también se dio el caso de moriscos que se ofrecieron a los castellanos como esclavos para no someterse a la expulsión de 1610.  En Extremadura la mayor parte de los esclavos que se han estudiado durante la Edad Moderna son descritos como negros, tintos, retintos, atezados, prietos... diferentes adjetivos que denotan el color oscuro de la piel de estas personas. Y esto nos lleva a relacionarlos con una procedencia africana, y la relación con los portugueses como abastecedores del mercado esclavista.
También están los negros originarios de América, que posiblemente llegaron a la Península acompañando a sus amos.

Luego, les seguirían en número los mulatos, con sinónimos como pardo, bazo, loro, trigueño, y la expresión más conocida "membrillo cocho " o "membrillo cocido", categoría donde entraban esclavos indios o berberiscos del norte de África. Pero sin duda, entre los esclavos mulatos predominan los nacidos en tierras peninsulares, bien en Portugal o en Castilla, así vemos en los registros "de nación portugués".

De igual forma que los niños libres, los nacidos de esclavas eran bautizados a los pocos días de su alumbramiento y pasaban a ser inscritos en los libros parroquiales; una inscripción que se convertía en un certificado de posesión para su dueño.  De ahí la importancia de los datos obtenidos de las Parroquias para conocer el comportamiento de la demografía esclava.

La mayoría de las anotaciones que corresponden con hijos de esclava no suelen contener referencias acerca del padre. Así, mientras que el párroco indica que el niño es esclavo o que lo es su madre, no ocurre lo mismo con el nombre de los padres, siendo omitido.  El esclavo bautizado suele mantener su condición de ilegítimo.

Zafra, constituyó el mercado de esclavos extremeño más importante durante la Edad Moderna. Durante la festividad de San Miguel, se celebraba una feria donde se distribuía la mercancía esclava, llegada principalmente de Portugal. Los principales mercaderes procedían de Lisboa, Olivenza y Montemor , y luego de Helvas, Estremoz y Vila Viçosa (a excepción de Lisboa, todas del Alentejo).
Aquí están registrados esclavos que se vendieron con destino a Agudo. 

Es destacable el hecho, que el principal propietario de esclavos en  Agudo, fuera un Portugués, Gonzalo Rodriguez.

Los esclavos fugitivos y su recuperación 

En el Archivo General de Navarra en los años 1548-1566 aparecen una serie de datos interesantes sobre la detención y encarcelamiento en las cárceles reales de Pamplona, de una serie de esclavos procedentes de toda la geografía española, y estuvieron retenidos allí mientras se daba un aviso a sus amos. Entre los casos que figuran, está Francisco Agudo, esclavo de Alvaro Pizarro, vecino de la Villa de Agudo. 

Según María Isabel Ostalaza Elizondo, llama la atención la ruta elegida de los fugados encaminada al reino de Navarra, cuando lo normal hubiera sido buscando cruzar el estrecho de Gibraltar. Esta elección estaba meditada, ya que los fugados intentaban llegar a Francia que tenía un tratado con el Imperio Turco para repatriar a los prisioneros de ambas partes. 

Cuando un fugado era detenido, generalmente se negaba a facilitar datos de su procedencia o de su dueño, por lo que pasaban varios meses, hasta que el verdugo conseguía obtener los datos, y empezaba entonces el proceso de retorno. Algunos llegaron a enfermar en este proceso, como es el caso de Francisco Agudo, que “tras 52 días de encarcelamiento, se le llevó al hospital desta ciudad a curarle”.. 

Integración social

Los libertos dejaron una huella documental escasa, lo que  dificulta conocer como se adaptaron a su nueva condición de individuos libres. Fundamentalmente se conocen por algunos testamentos.
Se piensa, en gran medida, que las posibilidades de integración de estas personas dependerían de diversas circunstancias, entre las que se encontraban los recursos con los que contasen. Recursos proporcionados por sus antiguos propietarios como donaciones o pagarles el aprendizaje de un oficio.

He encontrado una única liberada, en 1589, hija de Blas y de Catalina López.


Actualizado: el 14 de Octubre de 2011

Fuentes: 

- Gómez Vozmediano, M.F.: Mudéjares y moriscos en el Campo de Calatrava (s. XV-XVIII): espacios de convivencia, tiempos de intolerancia, Diputación Provincial de Ciudad Real , Año 2000.
- Ballesteros Diez, Jose Antonio: Esclavitud en la Extremadura del siglo XVI, 2005-2006
- Ostalaza Elizondo, María Isabel.: La Esclavitrud en los reinos hispánicos a lo largo del siglo XVI, en Popupulation & Démographie au Moyen Âge
- Periañez Gómez, Rocío: La esclavitud en Extremadura (Siglos XVI-XVIII), Tesis doctoral, Cáceres 2008.

sábado, 20 de noviembre de 2010

Consejos para la elaboración del árbol genealógico

Como ya he comentado en otras ocasiones, los Agudeños estamos de enhorabuena al tener los archivos parroquiales disponibles en Internet. Los mormones se encargaron de microfilmar los archivos parroquiales de toda España, y la Diocesis de Ciudad Real dio permiso a su publicación en Internet. Actualmente se pueden consultar las Diócesis de: Albacete, Avila, Barcelona, Ciudad Real, Gerona, Murcia y Salamanca.

En enlace actualizado es:  Registros Parroquiales de Agudo

En primer lugar, os recomiendo que utiliceis un programa, hay varios en Internet bastante buenos y gratuitos. Para sistemas operativos Linux está por ejemplo Gramps , y para Windows   Family Tree Builder y Personal Ancestral File, aunque hay muchos mas. Tenemos que buscar programas conocidos, que se vayan actualizando y que soporten el formato Gedcom, del que luego hablaré.


La forma tradicional de empezar un árbol de antepasados es coger papel y lápiz y empezar a preguntar a los abuelos. 
Supongamos que el estudio comienza con nosotros mismos, esto quiere decir que yo soy la primera generación, y mis padres son la segunda generación, la tercera generación son los abuelos paternos y los abuelos maternos,.....

- 1ª  Generación ---> tiene 1 persona
- 2ª  ---------------> tiene 2 personas
- 3ª  ---------------> tiene 4 personas
- 4ª ----------------> tiene 8 personas
- 5ª ----------------> tiene 16 personas
- 6ª ----------------> tiene 32 personas
- 7ª ----------------> tiene 64 personas
- 8ª ----------------> tiene 128 personas
- 9ª ----------------> tiene 256 personas
-10ª ----------------> tiene 512 personas
-11ª ----------------> tiene 1024 personas , y así sucesivamente

A partir de la 6 generación, el tema ya empieza a ser un poquito engorroso, y el papel se va quedando pequeño.

Los datos que normalmente necesitaremos y apuntaremos son:

- Nombre y apellidos, fecha de nacimiento/bautismo, fecha de defunción, fecha matrimonio, hijos, casado con.., si hay segundas nupcias también hay que apuntarlo, procedencia, oficio si lo sabemos,padres...

Si preguntamos a nuestros padres o abuelos, podemos llegar a la 3ª generación casi seguro  y a la  4ª con algunos problemas, pero la 5ª ya es más complicada. Si hemos llegado a la 4ª generación, tendremos un total de 15 antepasados, contándonos a nosotros mismos. 

Lo importante en este caso, es situarse en los primeros años de 1900, que es hasta donde se pueden visualizar los registros por Internet. La Ley de Protección de Datos impide ver los datos del Siglo XX.
Si hemos conseguido ponernos en 1900, ya podemos empezar a buscar antepasados, y yo aconsejo que lo hagáis a través de los libros de Matrimonios. Si cada generación está en torno a los 30 años, la edad media para casarse entre los hombres era en torno a los 26-27 años, y 21-22 en las mujeres.  Pues ese sería más o menos el cálculo inicial para ir buscando, a partir de la fecha de nacimiento, hay que buscar 28-30 años para encontrar el matrimonio. 

Si encontramos el matrimonio, los datos que nos aportan son muy valiosos, porque a parte del nombre y apellidos de los dos contrayentes,figuran  a finales del XIX, el oficio, la procedencia y  el nombre de los padres de cada contrayente. De esta forma, se puede a la 7ª generación casi sin problemas, lo que nos lleva en torno a 1810.

Pero a medida que nos vamos alejando en el tiempo, hay paginas que se leen peor, la información ya no es tan precisa  y empiezan las abreviaturas, o bien, hay omisiones por enfermedad del párroco.

Por ejemplo en  1865, el párroco enfermó y hubo varios años que dejaron de hacerse las anotaciones,pero el Obispo tomó cartas en el asunto y mediante notario, se obtuvieron todos los registros que faltaban ,  hasta 1876. Aquí figuran unos libros auxiliares que recogen todos los matrimonios, muertes y defunciones, y los nombres están ordenados. 

Otro "problema" es cuando encontramos a un antepasado que procede de otra localidad. Al principio nos hace ilusión ver de donde procedemos, pero luego nos llevamos una pequeña desilusión porque ya no podemos investigar por esa rama, a no ser que también existan en Internet los archivos de esa localidad, o "alquilemos" temporalmente el microfilm a los mormones para poder seguir localizando antepasados . Para ello, consultaremos los fondos microfilmados que existen del pueblo que estemos buscando en Fondos Microfilmados, introducimos el pueblo, spain y pulsamos buscar. Aparecerán los fondos microfilmados y el número. Existe la posibilidad de verlos en sus instalaciones por 8 euros durante 60 días. La otra posibilidad es dirigirse a los archivos de la correspondiente Diócesis.

Cuando tengamos dudas, bien porque no encontramos el registro, no se puede leer o hay dudas con el nombre de dos personas muy parecidas, hay que recurrir a los nacimientos.

En cuanto a lo del formato Gedcom que antes citaba, es un formato libre con el que trabajan la mayoría de los programas dedicados a la genealogía, y es la forma de pasar los datos de un programa a otro. Si varias personas aportaran sus árboles, llegaríamos a tener varios miles de personas registradas.  Por los datos que tenemos , podemos remontarnos hasta 14 o 15 generaciones.

Con tiempo, mucho tiempo, iré dando un tratamiento informático a estos registros. Ya os iré contando.

domingo, 14 de noviembre de 2010

La saga de la familia del Burgo

En otra entrada, ya hablaba de Don Juan del Burgo y de una serie de hechos que ocurrieron en  1675. Hoy me remontaré a los orígenes de esta familia en Agudo.

En 1612, el mercader holandés, Arnout Pieter Vandenburg, manda a su hijo Jan Vandenburgh - Juan del Burgo - , con su tio Juan Vilquens, factor retirado de los Fucares que vivía en Agudo.  Su tio le tendría que enseñar el oficio del mercader.

El 21 de Abril de 1608, Juan de Vilquens , natural de Amsterdam, contrajo matrimonio en Agudo con  Catalina de Yegros:

"en veinte y uno de Abril de seiscientos y ocho años, Desposé y velé a Juan Vilquens hijo de Juan Vilquens y de Quiteria Lucas, vecinos de la ciudad de Amsterdam en los estados de Flandes y a Doña Catalina de Yegros, hija de Francisco Serrano y de María Sánchez de Yegros su mujer. Fueron sus padrinos el Lcdo. Frey Juan de Yegros, Prior de Alcañiz del hábito de Calatrava y Catalina Muñoz, vecinos de esta villa de Agudo. Testigos Diego del Arco y Andrés Martín Presbíteros.
Frey Juan Mexía"



Juan del Burgo, realizó viajes comerciales  por Sevilla, Córdoba, Málaga, Granada, Madrid y Toledo. Al ver que su tio vívía como católico, y que estos  ejercían libremente su labor de comercio, decidió autoinculparse ante el tribunal de la Inquisición mostrándose como Luterano y tomando la firme decisión de conversión al catolicismo.

Existen más casos como este de autodenuncias "fingidas"  como solución para mejorar su actividad profesional y posición social. Quería evitar cualquier tipo de problemas relacionados con la religión, y en concreto con la Inquisión. En el archivo histórico  se puede consultar el Proceso de Fe iniciado en 1619 de Juan Vanderbourgh y que acabó con su reconciliación.

Anteriormente, el 22 de Mayo de 1617, Juan del Burgo contrajo matrimonio con la mujer de su tio, Catalina de Yegros,   tras llegar a un acuerdo para el reparto de la herencia que les había dejado el difunto  Juan Vilquens (Vilchans).



Posteriormente, Catalina de Yegros fallecerá y Don Juan del Burgo se casará el 16 de Enero 1630, en segundas nupcias con Isabel de Lares.
El 12 de Diciembre de 1649 fallece Isabel de Lares, y  Don Juan del Burgo vuelve a casarse  de nuevo con Doña Maria Muñoz del Arco, madre del Don Juan del Burgo que nace el  11 de febrero de 1651 y que aparece en 1674 junto el Gobernador de Cartagena de Indias, Don Jose Daza (casado con su hermana, Doña Isabel ).

Doña María Muñoz fallecería  y Don Juan del Burgo , hombre incansable, vuelve a contraer matrimonio en esta ocasión con Doña María Bonilla, natural de Chillón, el 15 de Junio de 1653, que muere en el parto de su hija Isabel en 1654.

También tenemos noticias de al menos dos esclavos que tuvo a su servicio: Lucrecia y Sebastián.

La historia de esta familia es muy interesante ya que tuvieron una influencia decisiva en numerosos hechos que sucedieron en Agudo.


Actualización: 30 de Septiembre de 2012

Fuentes:
Archivos Parroquiales de Agudo, Libros, Bautismos y Defunciones
Proceso de fe de Juan Vanderbourgh, ES.28079.AHN/1.1.1.49.3//INQUISICIÓN,109,EXP.11
Werner Thomas, "Los protestantes y la Inquisición en España en tiempos de Reforma y Contrarreforma", Leuven University Press

domingo, 7 de noviembre de 2010

Datos demográficos de Agudo: 1600 al 1900

¿Cómo era la vida antes?, ¿cuál era la esperanza de vida?, ¿cuántos hijos tenía una familia?, ¿a qué edad se casaban?, ¿se puede obtener un árbol genealógico?, ¿que oficios había?, ¿cuáles son los nombres y los apellidos más comunes?, ¿de dónde procedían nuestros antepasados?...

Los archivos parroquiales de Agudo, constituyen la fuente principal que he utilizado para la elaboración de este artículo que versa sobre los aspectos demográficos de Agudo desde el año 1600 hasta 1900 ,dejo para otra ocasión los siglos XVI y XX.

Los archivos pueden ser consultados en Internet, gracias a los mormones, que los digitalizaron (ojalá hubieran hecho lo mismo con los archivos municipales), y nos muestran el excelente estado en que se encuentran, excepción hecha de algunas páginas.

Como punto de partida, hay que señalar que la información que aparece va cambiando con el paso del tiempo. Así por ejemplo, al principio, no solían recoger las defunciones de los niños al nacer, situación que se prolonga a lo largo del XVIII , cuando si se anotes.. También hay casos de descuido o enfermedad del párroco, que olvida o no puede apuntar determinados registros. En estos casos, los visitadores trataban de solucionar estos problemas.

La edad de los fallecidos solo aparece durante un corto periodo de tiempo en el siglo XIX, y de forma generalizada a partir del último tramo del XIX.

Población 

En primer lugar, es necesario conocer los datos de la población y que se han obtenido de los distintos censos y visitas. Así tenemos la siguiente tabla:

Uno de los objetivos de este trabajo es ir describiendo esta evolución, con los hechos más significativos que provocaron bien un aumento o bien una disminución de la población y que por lo general son comunes al resto de España, aunque , por supuesto, con sus matices regionales y comarcales. Es un objetivo ambicioso y a la vez modesto, ya que supone la inversión de muchas horas de ocio personal , totalmente al margen de mi actividad profesional (jefa, si lees esto algún día, no te preocupes, lo hago en horarios fuera del trabajo) ; pero a la vez, es una satisfacción personal poder continuar relatando historias y hechos locales, tal como hizo mi padre, Don Pedro Jiménez Mansilla. Este Blog es un homenaje a él. 

Lo primero que llama la atención en la tabla anterior es que en el siglo XVI Agudo era una población relativamente importante, con una economía activa y con el rango de encomienda mayor de Calatrava, segunda dignidad en importancia dentro de la Orden. 

Sin entrar en más detalles de momento, indicar la importancia de la población morisca y la actividad económica que desempeñaban en el Campo de Calatrava y  las consecuencias negativas a raíz de la orden de su expulsión en 1609 promulgada por Felipe III. Esto será objeto de un artículo, y espero contar con la ayuda de un viejo y gran amigo, especialista en estos temas. Es un tema de actualidad, ya que se han cumplido 400 años de este suceso y se están celebrando muchísimos actos y eventos culturales para recordarlo. 

Así podríamos decir, que durante el Siglo XVI y XVII la media de población está situada en torno a los 1.600 habitantes; durante el XIX, volverá a romper la barrera de los 2.000 habitantes (después de 200 años), pero sin incrementos importantes hasta la última década. Y partir de siglo XX, debido a los avances de la medicina, alcanzamos el máximo en los años 1960, casi 5.000 habitantes, y finalmente, llegamos a la actualidad, con 1.871 habitantes censados en el año 2009. 

Matrimonios , Bautismos y Defunciones desde 1600 a 1900








Nupcialidad


Siglo
Matrimonios
XVII
1626
XVIII
1407
XIX
1723

Este es el total de matrimonios que se recogen en los libros parroquiales desde 1.600 hasta 1.899, que es donde finalizo el estudio.

Como comenté en la entrada Historia de los Registros Parroquiales , hay que tener en cuenta las velaciones y los desposorios. El Desposorio es como la declaración de intenciones y compromiso formal de la pareja antes de contraer el matrimonio. La Velación, era un acto en el que se pasaba un velo por la cabeza de la novia y por el hombro del Novio. Vendría a ser la ceremonia de matrimonio actual. Se registraban los dos actos en el libro, y con el tiempo, los párrocos iban apuntando en el mismo apunte del Desposorio cuando se hizo la velación , que podía ser incluso en otra parroquia. Además, poco a poco, los dos actos se celebrarán a la vez. 

La cifra de matrimonios es muy similar en los tres siglos que nos ocupan, dando unos promedios anuales de 16 bodas para el siglo XVII, 14 bodas para el siglo XVIII y 17 bodas por año en el XIX. 

Un hecho relevante que se observa en los gráficos, por ejemplo la del siglo XVI, es que al pico de defunciones, corresponde posteriormente el valor más bajo en el número de matrimonios, y a la inversa, el año que registra mayor número de matrimonios se corresponde con un descenso de la mortalidad. 

Obviamente esto muestra la relación tan estrecha que hay entre los diversos factores económicos, políticos y sociales del momento, sobre todo las pestes , enfermedades, hambrunas y hechos bélicos, que se traducen en levas, subida del precio de los alimentos o impuestos, factores que en su conjunto azotaron a la población. 

Origen geográfico de los cónyuges. Movimientos de población 

En los libros parroquiales aparece generalmente el lugar de procedencia de los cónyuges y el de sus padres. Este dato nos permite conocer las relaciones sociales y comerciales que había con la comarca y regiones periféricas.

No ha sido posible analizar todos y cada uno de los registros, pero si he visto un número importante de ellos que nos permitirán al menos iniciar un acercamiento que iré completando a medida que vaya profundizando.

Podemos hacer una división por zonas, en función de la época, así podríamos contemplar : Pueblos del Campo de Calatrava, Pueblos de la Orden de Alcántara, Arzobispado de Toledo, y más tarde: Provincia de la Mancha, Provincia de Extremadura, otras Provincias

Como el tema es muy interesante, de momento, solo haré una tabla indicando la procedencia de las personas que de una forma u otra, acabaron en el pueblo, eso si, sucumbiendo a los encantos de nuestros antepasados. Esto les hace pasar de “Naturales de ” a “Vecinos de esta Villa”.

*Dejo para otra ocasión, un estudio más detallado que lleve asociado además los apellidos.

Tabla Procedencia geográfica de los contrayentes
Siglo XVII
Siglo XVIII
Siglo XIX
Localidad de Origen
Localidad de Origen
Localidad de Origen
Tamurejo
Baterno
Siruela
Garlitos
Puebla de Alcocer
Herrera del Duque
Fuenlabrada de los Montes
Capilla, Badajoz
La Coronada, Badajoz
Cañamero, Cáceres
Talarrubias
Garbayuela
Herrera del Duque
Siruela
Garlitos
Fuenlabrada de los Montes
Baterno
Tamurejo
Casas de Don Pedro
Villarta de los Montes
Cabeza del Buey
Campanario
Monterrubio de la Serena
Jaraiz, Cáceres
Peñalsordo
Azuaga, Badajoz
Fuenlabrada de los Montes
Tamurejo
Campanario
Talarrubias
Baterno
Puebla de Alcocer
Herrera del Duque
Galizuela, junto a Esparragosa de Lares
Guadalupe
Zarza Capilla
Siruela
Garbayuela
Esparragosa de Lares
Castuera
Cabeza del Buey
Almendralejo
Olivenza
Chillón
Puebla de Don Rodrigo
Valdemanco
Saceruela
Abenojar
Corral de Caracuel
Santa Cruz de Mudela
Abenojar
Chillón
Valdemanco
Saceruela
Almadén
Gargantiel
Almagro
Puebla de Don Rodrigo
Manzanares
Malagón
Ciudad Real
Arroba
Horcajo
Membrilla
Almodovar del Campo
Villarta de los Montes
Consuegra, Toledo
Puebla de Don Rodrigo
Gargantiel
Saceruela
Chillón
Abenojar
Miguelturra
Valdemanco
Almadén
Puertollano
Ciudad Real
Luciana
Miguelturra
Piedrabuena
Anchuras
Almadenejos
Arroba
Villahermosa
Poblete
Quintanar de la Orden
Sonseca
Baeza, Jaen
Canena, Jaen
Córdoba
Capilla
Pedroche
Belalcazar, Córdoba
Viso de los Pedroches
Cabra, Córdoba
Torre Milano, Córdoba
Fuente Ovejuna, Aldea de la Granjuela
Valenzuela, Córdoba
Grañón, La Rioja
Vicálvaro, Madrid
Navalcarnero
Chinchón
Alcobendas
Portilla, Cuenca
Portugués , no indica de donde
Santiesteban, Portugal
Linares, Portugal
Viana, Portugal
Atero, Portugal
Portugués
Colmenar de la Sierra, Guadalajara
Carzoa, Orense
Torre de Arcos, Zaragoza
Puebla de Janabre
Mora, Aragón
Fresnedoso, Plasencia
Amsterdam
Real Sitio de San Ildefonso
Francés
Soria
Barchín del Hoyo, Cuenca
Valverdejo, Cuenca
Tejuncos, Cuenca
Sisante, Cuenca
Madrid

Viso del Alcor, Sevilla
Bilbao

Murcia
Valderas, Leon

Barcelona
Corella, Navarra

Castelseras, Zaragoza
Ruiseco ?

Campanet, Mallorca
Motril, Granada

Poveda de la Sierra, Guadalajara
La Torre ?



Otro dato que aparece reflejado a partir del siglo XVIII es el parentesco, si había relaciones de parentesco cercanas se solicitaba una bula.

La mayoría de las parejas estaban formadas por parejas de Agudo, y la mayoría de los forasteros pertenecen a poblaciones cercanas, en torno a los 30 kms. Aunque también vemos varios casos de Portugueses que se casan con agudeñas (¿en el siglo XVII, algún morisco que se fue a Portugal y luego volvío?). 

También se observa que la mayoría inscriben a sus hijos en Agudo, lo que indica permanencia en la población, aunque en algunos casos, se aprecia que la velación tuvo lugar en otra parroquia distinta. 

Estado Civil de los contrayentes 

Los archivos parroquiales recogen también este dato, lo que nos proporciona información sobre los usos sociales, mortalidad de los adultos, etc.

La mayoría de las parejas son ambos solteros, pero vemos también casos de soltero con viuda, viudo con soltera y ambos viudos, algunos en terceras nupcias.

Edad de los contrayentes

Los registros solo recogen este dato en el siglo XIX, y para obtener la edad, hay que cruzar los datos de bautismos con la fecha de matrimonio. Además, he comparado este dato con otros estudios y llegamos a la siguiente conclusión:



Ya entonces era común que el hombre supere en edad a la mujer.

De nuevo, tenemos que hablar de los viudos. Hay mayor proporción de hombres que de mujeres, una de las causas es la mortalidad de la mujeres al dar a luz, aunque no la única. Así vemos, que una alta proporción de viudos contrae sus segundas nupcias antes de los 30 años, en su mayor parte con solteras. Si son de más edad, suelen contraer matrimonio con viudas.


Natalidad 

Los datos que se mencionan del recién nacido comienzan con la fecha de su bautizo, muy pocos días después del nacimiento, a continuación figura el nombre, salvo que hubiera nacido muerto o sin tiempo de ponerle un nombre. Luego vienen los nombres de los padres, si se trata de un matrimonio legítimo o no, los abuelos y finalmente, los padrinos.

Durante el periodo estudiado, el total de bautizados según los registros de los libros de Bautismos fue:








El promedio anual de bautizos es de 55, 52 y 75 respectivamente.

Se observa, que durante los primeros años del siglo XVII, el número de nacimientos va disminuyendo de forma notable hasta 1635 , y ahí se queda estabilizado hasta 1784 en que empieza a crecer de nuevo. 

La disminución del XVII respecto al siglo anterior, viene explicada por la pérdida de población que sufrió Agudo,y que creo está relacionada con los hechos de 1609, tal como comenté anteriormente. 

Las tasas de natalidad van oscilando desde un 44 por cada 1.000 habitantes (1602), al 21 (1653), un promedio de 30 durante muchos años, 19 (1708), en torno a 35 a finales del XVIII y XIX, y picos en la década de l880. 

He visto varios casos de gemelos, y normalmente solían tener más dificultades que los nacimientos normales. 

Para hallar el número de hijos que podía tener un matrimonio sin entrar en muchas complicaciones, cruzamos los datos de los matrimonios, con el número de nacimientos e incluso las defunciones, y nos dan 3,6 hijos de media por matrimonio en el XVII, 3,7 en el XVIII y 4,3 en el XIX. 

Hay algunos niños expósitos o abandonados, de padres desconocidos, como ocurrió en 1878, con “un niño que fue hallado la noche anterior en la calle del Rendido casa de Petronilo Fernández sin ninguna señal.., se le puso por nombre Faustino”

Mortalidad






En los libros de difuntos de los Archivos Parroquiales, el párroco recoge el nombre y la fecha de la muerte, si recibió atenciones espirituales antes de morir, si dejó hecho testamento, si era pobre, el tipo de funeral celebrado, donde es enterrado (depende de la época), el número de misas que deja por su alma o por las de sus antepasados, la causa de la muerte y la edad (depende), si está casado o viudo. También, aparecen donaciones y fundaciones de capellanías. 

Se incluyen los fallecidos en el Hospital de la villa, que de forma general, son “pobres de solemnidad” , mendigos, transeúntes, etc... 

Hay que indicar que durante el XVII los párrocos no registraban casi níngún caso de mortalidad infantil,hecho que si sucede en el XVIII y sobre todo en el XIX, donde es más riguroso. Se conoce como “Párvulos” a los menores de 7 años , y en la mayoría de las ocasiones no se pone ningún nombre, solo “Párvulo o Hijo/a de ….” 

Los registros de defunciones comienzan en Agudo en 1621. Este hecho y la omisión de los fallecimientos de los párvulos, hace que tengamos tan solo 3.158 casos de defunciones para el siglo XVII. Con las correcciones oportunas, esta cantidad se elevaría hasta ser más o menos equivalente al número de bautizados. 

La mortalidad infantil supone en algunos casos más del 50% de la mortalidad total. El momento del nacimiento era el momento de mayor peligro para la supervivencia del bebe. La gestante daba a luz en su propia casa, ayudada por las vecinas o la comadrona, y solo en casos más complicados se recurría al cirujano. La madre compartía con el bebé el riesgo del parto y en ocasiones, la misma tragedia. 

Pero no todos los párvulos morían al nacer. Este era el momento crítico, si lograba sobrevivir, el riesgo estaba en las próximas semanas, y si llegaba a los dos años, su esperanza de vida iba al alza. Si pasaba de los 7 años, realmente había ya posibilidades de llegar al menos hasta los 27 años. Y a su vez, quienes superaban esta edad, podrían llegar a los 50 años. 

En el Siglo XVII-XVIII, y hasta bien entrado el siglo XIX, la esperanza de vida media en España no era superior a los 27 años. Si la tasa de natalidad era elevada, del 42 por 1000, la tasa de mortalidad también era elevada, del 38. Esto hace que el numero de nacimientos y muertes estén casi parejos. En el gráfico de Agudo del Siglo XVII, no se aprecia porque no se registran los fallecimientos de los párvulos, sino serían casi iguales, lo que hace que la población sea estable durante estos años. 

En el gráfico del siglo XVIII, si se observa este dato, y el resultado final es favorable a los nacimientos, pero no por mucho. Sin embargo, en el Siglo XIX, si se van distanciando, y aunque hay picos de mortalidad muy elevadas, se observa que la esperanza de vida de las personas va creciendo. 

Esto se apreciaría con mucho mayor detalle si tuviéramos los datos del siglo XX, a partir de la década de los 50, donde los avances de la medicina, la hingiene, la educación, el descenso del número de hijos por matrimonio, hacen que la tasa de mortalidad infantil caiga hasta un 5 por 1000, y la esperanza de vida de una persona al nacer, esté situada en torno a los 80 años.

Volviendo al periodo que nos ocupa, las enfermedades epidémicas se cobraban su precio, especialmente en los sectores más pobres en los que el peligro de malnutrición e inmovilidad era mayor. La viruela, la fiebre amarilla y el cólera eran los principales agentes de muerte, seguidos de cerca por el tifus, la difteria, el paludismo y la tuberculosis. España sufrió seis crisis generales de mortalidad en el siglo XVIII, en 1706-1710, 1730, 1741-1743, 1762-1765, 1780-1782 y 1786-1787, y otra en 1804, durante la cual la crisis agraria se unió a las enfermedades epidémicas. 

Consecuencia de la escasez de alimentos, serán en 1762-1765 y 1798-1799. Pero las crisis más frecuentes eran aquellas en las que el hambre actuaba de forma conjunta con la enfermedad creando situaciones de mortalidad catastrófica, como en 1786-1787 y 1803-1805. 

El crecimiento de la población exigió mayores recursos, y esta demanda provocaba la subidad de los precios. A su vez, el crecimiento de la población rural determinó una demanda más elevada de tierra, lo que también incrementó su precio. Las rentas se incrementaron a los campesinos arrendatarios. Los jornaleros eran el sector predominante. 

Los Ilustrados pretendieron hacer una reforma agraria y para ello redactaron informes a lo largo de toda la geografía española. Los legisladores eran conscientes de que el acceso a la tierra era la clave de la reforma agraria. A partir de 1770, se inician una serie de reformas destinadas a solucionar este problema, pero no consiguieron su objetivo. 

Durante el siglo XIX, las crisis fueron más intensas que la de los dos siglos anteriores. La peor fue en 1855. Hubo crisis alimenticia en 1817, 1823-1825, 1837, 1847,1868,1879, 1887 y 1898.  Las epidemias no fueron derrotadas hasta el siglo XX. El último brote de cólera significativo es el de 1885. 

En Agudo, vemos que durante el año 1836 fallecieron 110 personas, en 1858 un total de 92, en 1874 se dispara hasta 146, 84 en 1885, 93 en 1890... Es decir, los picos de fallecimientos coinciden con los periodos de crisis epidémicas y crisis alimenticia que hubo por toda España.  Los años más duros marcan un crecimiento vegetativo negativo. 

Con esto finalizo este artículo, un poco extenso, pero creo que bastante interesante por los datos que aporta sobre Agudo.
  
Fuentes:

Archivos Parroquiales de Agudo
Albert Carreras y Xavier Tafunell, "Estadísticas históricas de España: Siglos XIX-XX", Fundación BBVA, 2005.
Adrian Shubert, "Historia Social de España (1800-1990), Ed. Nerea
Fernando Martinez Gil, "Muerte y Sociedad en la España de los Austria", Colección monografías, Ediciones Universidad de Castilla -La Mancha ,2000
Vicente Perez Moreda, "La crisis de la mortalidad en la España interior"
Juan Ignacio Carmona, "Enfermedad y Sociedad en los primeros tiempos modernos", Universidad de Sevilla.
Juan Manuel Garde Garde, Demografía de Mélida en la Edad Moderna (siglos XVII-XVIII) , a partir de los archivos parroquiales.
Historia de España,  Edad Moderna: Crisis y recuperación, 1598-1808, Dirigida por John Lynch