lunes, 20 de diciembre de 2010

Sobre la Orden de Calatrava (IV)

Gestión de la Encomienda Mayor 

La corona realizó una política reformista donde se combinaba la conservación de la mayor parte de su estructura medieval con cambios que permitieron su adaptación a los nuevos tiempos.

La función de las Órdenes Militares fue la de suministrar honor y rentas a los mandos militares más destacados como pago a sus servicios.
En 1689 fue concedida su administración con el goce de frutos durante 33 años a la Orden Tercera de San Francisco para poder pagar el rescate del Gobernador y cien oficiales hechos prisioneros por musulmanes en Larache, al norte de Africa. El Conde de Peñaranda había fallecido en 1690 y hasta 1693 la gozó D. Baltasar de Mendoza y Sandoval, que la tuvo de forma honorífica sin rentas. A este le sucedió Joaquín Ponce de León, VII Duque de Arcos, de forma honorífica hasta 1721. Tras los años que los religiosos terciarios habían gozado de las rentas de la encomienda el Duque de Arcos tomará posesión de las rentas hasta que muere el 18 de marzo de 1729. Las razones de que la Orden Tercera obtuviese esta merced por 33 años eran por el pago de mil moros que se habían de entregar por el rescate del General D. Fernando de Villorras y cien cautivos de la rendición de Larache. Este hecho marcó la concesión de la encomienda ya que no reportaba rentas a los titulares hasta que se acabó el plazo adjudicado por la deuda pendiente.

Joaquín Ponce de León (?-1729) en la Corte de Carlos II fue Gentilhombre de Cámara del rey y con la llegada de los Borbones fue desterrado en 1701 por haber protestado contra la nobleza francesa. Su ideario político era borbónico pero antifrancés. En 1705 era nombrado Virrey de Valencia y recibía el hábito de Calatrava y la Encomienda de Vállaga, un año mas tarde era Consejero de Estado. Ocupó diferentes cargos políticos, obtuvo los títulos de XII Duque de Maqueda, Conde de Bailén y Conde de Casares. Al final de su vida servía como Adelantado Mayor del reino de Granada hasta su muerte el 18 de marzo de 1729.En 1712, la Orden de Santiago tenía 91 encomiendas, Calatrava 56 y Alcántara 38, y entre las tres rentaban medio millón de ducados al año (cinco millones y medio de reales). A estas se sumaron Montesa, la del Toison de Oro y la Orden de Carlos III. Todas estaban reservadas a la nobleza cortesana, única con posibilidad de ingreso. 

Según Dominguez Ortiz, las mejores encomiendas en el siglo XVIII las usufructuaron los Infantes, las demás encomiendas se repartieron entre una nobleza de servicio.

Los Infantes: una mejor gestión

Encomienda Mayor de Calatrava 

Felipe
1729-1766
Francisco Javier
1766-1771
Gabriel
1772-1788
Carlos IV
1789-1802
Carlos María Isidro
1802-1809

Con la llegada de los Infantes de la Casa de Borbón a la propiedad de las encomiendas estas van a tener unas nuevas reglas para su administración. Se hicieron instrucciones generales para todas y sobre algunas se concretaron adaptaciones para obtener el mayor beneficio como es el caso de la Encomienda de Manzanares o la Encomienda Mayor de Calatrava.

El Marqués de Surco, administrador general de todas las encomiendas de los infantes, daba instrucciones a Jacinto Ore, administrador de la Encomienda Mayor de Calatrava: "No ha de ejecutar reparo alguno en casa, iglesias ni otros edificios de la encomienda, excediendo el coste de 120 r. de vellón, sin dar primero quenta a S.E Y porque del descuido que suele haver en reconocerlos y repararlos anualmente, nazen siempre grandes perjuicios, deverá el administrador en el mes de marzo de cada año, hacer reconocer a un Maestro de obras todos los edificios de la encomienda. Y por lo que toca a las iglesias de ambos pueblos [Agudo y Abenojar] las hará reconocer mui cuidadosamente refiltrados los tejados, los zimientos y todas las paredes exteriores e interiores. Y no solo se ha de satisfacer con esto sino que ha de saber de los curas y sacristanes de ambas villas si han visto o notado de alguna gotera y otro defecto en cualquier parte del edificio de la iglesia..."

En 1729 se produjo un viaje de la Familia Real e Infantes, de Madrid a Sevilla, en 19 jornadas , descansando en Manzanares y Córdoba. Esta comitiva pasó por muchos pueblos de Ordenes Militares lo que fue motivo de fiestas y expectación ante el paso de tan importantes personajes. 

Los Infantes recibieron un trato de favor desde el trono para dotarlos de rentas que permitiese cierta independencia económica al convertirse en mayores de edad.
El Cardenal-infante D. Luis Antonio Borbón y Farnesio al reunir más de treinta encomiendas consiguió unas rentas de más de tres millones de reales al año. Tanto el Infante D. Felipe como D. Luis eliminaban la mayoría de las cargas fiscales de su medio centenar de encomiendas en 1737. 

Francisco de Paula y Carlos María Isidro recibieron en 1802 las encomiendas que su padre Carlos IV tenía por herencia de Carlos III (que a su vez habían pertenecido al Infante D. Luis Antonio) y del Infante D. Gabriel. 

En las 19 encomiendas de Carlos María Isidro había un interés por potenciar su beneficio económico. Las rentas de encomiendas de Órdenes Militares que los Infantes recibían junto a otros beneficios de la Casa Real sumaban el dinero que necesitaban para sufragar sus gastos anualmente.

El 12 de noviembre de 1729 el Infante Don Felipe tomaba posesión de la encomienda (1729-1766). Bartolomé Sánchez Zamora, vecino de Herrera y maestro alarife examinado “, tomaba nota de los reparos que necesitaba la casa que la encomienda había comprado en la villa de Agudo. Se necesitaba ampliar una cueva (bodega) para mejorar el rendimiento económico de la encomienda, lo que hizo por Juan Agudo de Mesa, sobre 1734, vecino de Hinojosa y “maestro de obras examinado”. Al tomar posesión de esta encomienda el administrador recibirá nuevas instrucciones para la mejor gestión de esta Encomienda Mayor de Calatrava. El Marqués de Surco, administrador general de todas las encomiendas del Infante, dio instrucciones específicas al administrador de la encomienda d. Jacinto de Ore. Entre las primeras referencias sobre la Encomienda destaca la necesidad de reparar los ornamentos de las iglesias de Agudo y Abenojar, además de la existencia de importantes rentas de los arrendamientos de pastos. El Marqués de Surco en 1731 pleiteaba con la villa de Agudo sobre el derecho a tomar las cuentas de pósito, iglesias, ermitas , santuarios y cofradías. Pretendían hacerlo los alcaldes y regidores de la villa, lo que se prohibió por tener el derecho la encomienda. El administrador de la Encomienda Mayor de Calatrava en 1734 pedía que se respetasen sus derechos de cortar leña en la dehesa de Villagutierre de la Villa de Almagro. 

El administrador de la Encomienda Mayor de Calatrava pleiteó sobre diferentes regalías y preminencias pertenecientes a la encomienda en 1735 para defender los derechos del Infante D. Felipe en las Villas de Agudo y Abenojar. El “Teniente” o “Mayordomo” o “Administrador de la encomienda” era el Mariscal de Campo D. Francisco de Ocampo. Por fallecimiento del Marques de Surco, D. Fernando Suarez de Figueroa era nombrado Gobernador de S.A. Y Administrador General de todas sus encomiendas de D. Felipe. Se explicaban las funciones que debía tener el administrador general que eran básicamente conservar y aumentar las rentas de las encomiendas. Controlaría los los arriendos, las cuentas, los cobros, los censos, la satisfacción de las cargas reales y ordinarias, la toma de posesión de nuevas encomiendas, sus descripciones, el reparo de los edificios, el cuidado de los derechos de las encomiendas y la gestión en los pleitos. 

Según el Marques de Surco, en 1733, había problemas con los derechos de la encomienda en la villa de Agudo, ya que la administración señorial solicitaba su derecho a pastar en dos ejidos elegidos por el comendador en el término de Agudo situado entre “las hazas que se sorteaban entre los vecinos de aquella villa”. 

Una serie de preeminencias tenía la encomienda en la villa de Agudo en 1733. Como poner alguacil sin dar parte a la villa, en las derramas concejiles había de estar presente el comendador o su representante, y en los cabildos, igual , tomar las cuentas al concejo, iglesia y ermitas, derecho de pasto en la villa, de debía de señalar dos suertes (las mejores) al sortear las tierras, el mayordomo (“franco y libre de pechos”) podía pastar en esas tierras con su ganado, en marzo, abril y mayo de cada año no podían los vasallos vender su vino para que se vendiera el de la Encomienda, derecho a poner guardias en la dehesa boyal y en las tierras de viñas, panes y encinas, no se podía sacar vino de la villa con la excepción si era para casamiento de hija o compra de bueyes o raiz, le pertenecía la mitad de la hierba que se vendía en el término, el derecho de los entrepanes (la mitad de cada año) y las penas, calumnias y mostrencos. 

La relación entre los vasallos y los comendadores acababan frecuentemente en los tribunales. El Infante D. Felipe pleiteó en 1755 con la villa de Agudo sobre el modo de elección de oficios de justicia.

Al tomar posesión de la encomienda el Infante D. Francisco Javier (1766-1771) se realizaron nuevos deslindes y apeos en las dehesas pertenecientes al señorío. Desde 1765 a 1769, la Encomienda Mayor de Calatrava proporcionó 1.216.575 reales al Infante D. Fernando, Duque de Parma.

Gastos de mejora y mantenimiento

Localidad
Jurisdicción eclesiástica
Obispado/Prioratos
Iglesia Parroquial
Otros espacios religiosos
Asignación al Párroco
Asignación de tenientes y número
Asignación de Fábrica
Agudo
Gobierno eclesiástico de Calatrava




San Benito
Dos ermitas y un santuario


4.500


2.000 (1)


1.575

AHN, OOMM , Libro 1.281

Cuando fallece D. Francisco Javier en 1771, las encomiendas se dividen entre sus hermanos, y el Duque de Parma, su primo. Posteriormente, en 1779, se dividen las de D. Gabriel y las de D. Antonio- Bajo D. Gabriel (1772-1788) la encomienda estaba siendo administrada junto a la de Casas de Sevilla y Niebla y el Gran Priorato de San Juan de Jerusalén por los mismos administradores. Las rentas durante estos años fueron;

Año
Caudal
Gastos
Líquido
1.777
182.264
26.121
156.142
1.778
172.700
24.674
148.025
1.779
183.497
21.274
162.222
1.780
195.649
23.687
171.961
1.781
188.128
21.828
166.290


El Rey absorbió esta encomienda en su beneficio tras la muerte del Infante D. Gabriel (1788), junto a la Encomienda de Casas de Sevilla y Niebla.

La nueva organización administrativa se incorporaba a las nuevas oficinas de Madrid en 1797, tras la indicación de Manuel Godoy y pasaban a administrarse con un nuevo método y con variación de las oficinas para ahorrar dinero. Además se descríbían los cargos y nombramientos de esta manera:
  • Joaquín Antonio Alvarez, Gobernador y Administrador General de Agudo
  • Miguel Algano, Administrador de Abenojar
  • Felipe Joseph Artesano, administrador de las dehesas.

En 1802, la encomienda pasa del propio Rey a la propiedad de su hijo Carlos María Isidro, junto a otras, valorándose sus rentas en 287.757 reales de beneficio líquido anual. La etapa bajo su propiedad sería interrumpida por la Guerra de Independencia (1809-1814) que fue administrada por el gobierno afrancesado y por el secuestro de las rentas por el gobierno con el estallido de la Gerra Carlista 81833) hasta su venta en la desamortización.

López Salazar indica que a principios del XIX, la Encomienda Mayor de Calatrava que gozaba el infante D. Carlos María Isidro pretendía hacer cumplir todos los derechos de los tiempos medievales. Algo que chocaba con la práctica y lo ocasionó violencia social en algunos lugares (Agudo en 1803 y 1806). La defensa del cumplimiento de todos los derechos de los señoríos de Órdenes a estas alturas estaba perdida1

En 1804 se producía un pleito de la encomienda con Abenojar. Se trataba de una denuncia porque los oficiales albañiles que estaban trabajando en una casa y jardín, cerca de Abenojar, que se estaba realizando por la viuda de un militar y sus dos hijos tuvieron que ir obligados a trabajar en el granero y reparar la bodega de la casa palacio de la encomienda ya que los comendadores tenían preferencia sobre los vecinos. Esto ocasionó insultos al Infante Carlos María Isidro, propietario de la encomienda, por lo que se actuó jurídicamente. Juan Manuel Romero, administrador gobernador de la villa metió en prisión a la viuda y sus dos hijos. Los tres salieron a la calle porque no se demostraron los insultos al Infante y se previno al administrador para que los privilegios de la encomienda fueran hechos saber a los interesados en tiempo y forma “para que no alegues excusas ni la ignorancia en que se han valido en el asunto presente”.

Continuaron los pleitos por los derechos de la encomienda en 1807. El Duque de la Roca, como Director de las encomiendas de los infants Carlos y Francisco de Paula, defendía su interés económico sobre las regalías y derechos de la encomienda Mayor de Calatrava en el término de Agudo, Abenojar y otros pueblos, aunque este pleito se cerró en octubre de 1809 si ninguna alegación de las Juntas.

Las propiedades en los términos manchegos de Abenojar y Agudo 2, mas los andaluces de Fuenteovejuna y Bélmez diezmaban rentas que eran superiores a la media de los señoríos de las Órdenes Militares.

La Contaduría General de Encomiendas consignaba el 23 de mayo de 1809 los derechos y el valor de la Encomienda Mayor de Calatrava.

En la Villa de Agudo, la encomienda tenía el diezmo integro de granos, dos terceras partes de las igualadas de los herreros, vaqueros y de las maquilas de los molinos, dos terceras partes del diezmo de ganados (potros, cerdos y becerros), diezmo de uva y aceituna, dos terceras partes del diezmo de enjambres, diezmos de alcacer, lino y linaza, dos terceras partes de ganado lanar y cabrío, diezmo de los ganados forasteros que pastan, dos terceras partes de los diezmos de lana, añinos y quesos, diezmo de zumaque y otras minucias, diezmos de teja y ladrillo fabricados en los hornos de la villa. Se citaba el Molino del Cubo, en posesión de un vecino de Fuenlabrada, Eugenio Cabrera, y otro molino arrendado a Juan Garzón de Astorga. Ambos pagaban la maquila pero no las cuatro gallinas que debían pagar también. Sin embargo, los otros dos molinos que pertenecían a la encomienda si satisfacían el pago de las gallinas (Molino del Puente y Molino del Lobo). Se añadían 15 molinos y dos batanes arruinados, lo que evidencia un pasado más productivo en este terreno. En la ribera del rio Frio habían pertenecido a la encomienda otros cuatro molinos y dos batanes de los que incluso se ignoraba la localización de sus ruinas. La encomienda poseía en esta villa una “posada de colmenas” en un lugar llamado Ortunero, término de Agudo, con veinte colmenas. También dos tierras de labor cercadas, una en la calle de la Fuente y otra en el Arroyo de las Campanas. Mas dos huertos unidos en el sitio llamado de la Fuente del Orejudo. La huerta del comendador en el sitio llamado de Padilla, de pasto y labor , “con algunas cepas puestas sin orden de viduño moscatel” y varios olivos, pinos y álamos negros. Dos charas para “enrriar “ lino, con monopolio de la encomienda.

En la Villa de Abenojar, poseía la dehesa de Villagutiérrez (con 21 quintos de cuatro leguas de circunferencia), un solar de casa extramuros inmediato al ejido donde emparvan los vecinos y ochos propiedades agrarias. En los diezmos había una división desde “el cordel” hacia arriba o hacia abajo. Hacía el norte el diezmo integro de granos pertenecía a la encomienda, hacia el sur dos terceras partes y el resto era para el Arzobispado de Toledo. El diezmo integro de las ocho propiedades pertenecía a la encomienda, así como el diezmo de las igualadas de vaquero, yegüero y herrero. Los diezmos de los molinos harineros, dos terceras partes de ganados (potros, becerros y cerdos), dos terceras partes de enjambres, diezmos de huertas y alcaceres, diezmo de minucias, teja y ladrillo, dos terceras partes de corderos y chotos (ganado blanco) igual de queso, diezmo de burros y renjares, medio diezmo de las crías de merinos que pastan en los valdios, bellota, agostadero e invernadero, hiervas de verano, mitad del valor de la venta de cualquier hierva, la mitad del diezmo del quinto de Matalloso de la villa de Almodovar que posee en Abenojar. Le correspondía el paso del puerto de Villarta y por el 100 ovejas que pagan al año en la entrada del invernadero los ganaderos de Soria, Cuenca y Molina. También se consignaban algunas fincas perdidas y arruinadas que pertenecían a la encomienda en 1766 pero que se ha bían echado a perder y dos molinos arruinados . También tenía el derecho de roda de los llanos en las poblaciones de Abenojar, Saceruela, Cabezarados, Almodovar, Villamayor, Puertollano y Caracuel.

En la Villa de Calzada de Calatrava la dehesa de Fresnedas Bajas (doce millares de fanegas de tierra con una longitud de dos lengua y media y una latitud de legua y media). El apeo de la dehesa se hizo en tiempo de D. Francisco Xavier (1766). En el Viso tenía la dehesa de Fresnedas Altas. Se cobraban en ambas dehesas los diezmos de ganados y de granos.

En Azuaga (partido de Llerena, en Extremadura) tenía la dehesa de los Cañuelos (monte , pasto y labor de unas 200 fanegas de sembradura). Percibía esta encomienda 882 reales por el goce de la dehesa de las Trasquiladas. Además, le correspondía el portazgo de Bélmez (Jaen) y por último la encomienda tenía una serie de derechos que se habían perdido con el tiempo por una mala administración. El valor según las cuentas de 1806, y por la relación hecha en 1809 por la Contaduría General de Encomiendas ascendía a 287.757 reales.


Jurisdicción eclesiástica
Encomienda Mayor de Calatrava ( o de Castilla)

Las iglesias de las villas de Abenojar y Agudo, en el Campo de Calatrava, correspondían a la encomienda junto al digno mantenimiento de los altares y ornamentos, los nombramientos y congruas de sus rectores. En estas iglesias tenía la preeminencia de asiento en el presbiterio el titular de esta dignidad. Las parroquias eran dirigidas por un párroco o cura rector, perteneciente al Convento de Calatrava, que recibía un salario que aumentó de forma considerable durante el siglo XVIII. Entre la religiosidad de los vasallos de la villa de agudo en 1731 se habían organizado tres cofradías en la iglesia parroquial de San Benito, patrono de la villa , (Veracruz, La Caridad y San Benito). Existía un hospital en la villa. Sobre la injerencia, intervención y corrupción de los miembros del concejo de la villa se decía en aquel año “no les faltaba a los alcaldes de Agudo más, que tomar las llaves del sagrario”3.

La iglesia de Abenojar tenía a mediados de siglo 47 vecinos y tenía como anejos a Cabezarados y Luciana. Agudo tenía 300 vecinos, con dos sacerdotes y dos ordenantes para el control espiritual de la villa. La Iglesia  tuvo algunos reparos en 1698. Le pertenecía el anejo de Puebla de Don Rodrigo, aunque sus gastos pertenecían a la Encomienda de Bolaños por cobrar esta sus diezmos. La encomienda realizó obras por más de 6.000 reales y un retablo de 4.000 r. en 1698. Esta pagó las obras tras la Guerra de Sucesión española que consistieron en 15.757 reales de obras y 9.015 reales de ornamentos4. La iglesia de Abenojar estaba reparada en 1742 por las rentas del infante D. Felipe. Sin embargo, la iglesia de Agudo que estaba hecha en 1553 y no tenía capillas, necesitaba reparar sus seis altares eran el de Nª Sª del Rosario, Nª Sª del Carmen, Nª Sª de la Caridad, el de Jesús Nazareno, Nª Sª de la Concepción y el altar mayor.

La iglesia de su anejo Puebla de Don Rodrigo no tenía capillas y si cinco altares, sin un mal órgano que aportara su música5.

El Conde de la Cimera, en 1797, nombró a Juan Manuel Gómez Romero, oficial mayor de administración de las rentas del Gran Priorato de San Juan, como contador interventor para controlar las obras de la iglesia de la villa Agudo “... presenciar la grande obra de reedificación de aquella iglesia parroquial” que se estaba ejecutando de los caudales de la encomienda mayor de Calatrava6.



Fuentes:

- Juan A. Gijón Granados: "La casa de Borbón y las Órdenes Militares durante el siglo XVIII(1700-1809), Año 2009.
1Jerónimo Lopez-Salazar Perez “Los conflictos entre las Ordenes Militares y sus vasallos durante la Edad Moderna, Jéronimo Lopez Salazar Pérez. Las Órdenes Militares en la Península Ibérica, Vol. II, Edad Moderna, Universidad de Castilla -La Mancha, Cuenca 2000, p. 1922.
2Una descripción de la encomienda Mayor de Calatrava. Agudo y Abenojar AGP, IDG. Secretaría Leg. 565/5.
3AHN, OOMM, AHT, Nº 46.817, 2º Legajo
4OOMM. Libro 309
5AHN. OMM Libro 310
6AGP, IDG, Secretaria Leg. 708.

sábado, 18 de diciembre de 2010

Sobre la Orden de Calatrava (III)

Titulares de la Encomienda Mayor de Calatrava desde 1466 

En el siguiente listado aparecen los Titulares de esta Encomienda Mayor a partir de 1466:

- 1466, FERNAN GÓMEZ DE GUZMAN , durante el Maestrazgo de Don Rodrigo Téllez Girón; murió en 1476 en Fuente Obejuna.

- 1482. DIEGO GARCIA DE CASTRILLO , durante el Maestrazgo de Don García López de Padilla, murió en 1497.

- 1497, GUTIERRE DE PADILLA, hasta 1515.

- PEDRO NUÑEZ DE GUZMAN, hasta 1523.

- 1523 , GARCÍA DE PADILLA, hasta 1542. Seguramente, el más conocido en Agudo, ya que entre otras, legó 100.000 maravedies para construir la iglesia parroquial de Agudo

- 1544, FADRIQUE ALVAREZ DE TOLEDO, IV  Duque de Alba.

El rey Felipe II lo desterró por haber faltado a su palabra de matrimonio , rompiendo el compromiso con Magdalena de Guzman. Fue pillado por Isabel de Valois con una de sus Damas. Se casó en secreto en 1578 con su prima María de Toledo.

Don Fadrique envió cartas a su padre desde Abenójar. En Agudo  el 1 de Abril de 1576 se bautizó a Mariana , hija de Maese Jorge, criado del Ilmo. Don Fadrique.



- 1585, DIEGO HERNANDEZ DE CORDOBA, anteriormente comendador de Bolaños, y recibió la Encomienda Mayor en Administración.

- 1599, DIEGO GÓMEZ DE SANDOVAL, conde Saldaña

- 1674, GREGORIO GENARO DE BRACAMONTE PACHECO, Conde de Peñaranda, hasta 1689.

- 1689, Administración con Goce de Frutos por 33 años de la VENERABLE ORDEN TERCERA DE SAN FRANCISCO.

-1690, BALTASAR DE MENDOZA Y SANDOVAL, como Comendador colado. Durante la administración por la Orden Tercera durante 33 años debieron nombrarse varios comendadores colados, que solamente tenían el honor de título.

- 1721, JOAQUÍN PONCE DE LEÓN, Duque de Arcos, hasta 1729.

En el Archivo Parroquial, aparece un matrimonio el día 27 de Noviembre de 1728 entre Julián Ponce de León  y María Teresa de Arenas. Los padres de él son: Manuel Ponce de León y Alfonsa Martinez,naturales de Chinchón  y los de ella, Juan López y Josefa María de Arenas de Consuegra.

Posiblemente sean  miembros de esta familia.



Periodo de los Infantes: 

- 1729, EL INFANTE DON FELIPE, en administración con goce de frutos. Fue hijo del rey Felipe V y figuró como Duque de Parma. Falleció en 1771.

- 1766, EL INFANTE DON FRANCISCO XAVIER, en administración con goce de frutos. Hijo del rey Carlos III. Falleció en 1789.

- 1802, EL INFANTE DON CARLOS MARIA ISIDRO, en administración con goce de frutos. Fue el segundo hijo de Carlos IV, y pretendiente al trono de España tras la muerte de Fernando VII. Al disponerse la ley Sálica, se produjo la guerra Civil de los Carlistas. En 1835 son secuestradas las posesiones que tenía.



Fuentes:

- Corchado Soriano, Manuel.: Las Jerarquías de la Orden con Rentas en el Campo de Calatrava, Instituto de Estudios Manchegos, Excma. Diputación Provincial de Ciudad Real, 1983.
- Libros de Bautismos, Matrimonios y Defunciones de Agudo

viernes, 17 de diciembre de 2010

Sobre la Orden de Calatrava (II)

La Encomienda Mayor de Calatrava 

Se trataba de la segunda dignidad de la Orden tras la figura del Maestre. Desparecido este cargo tras la absorción de los Reyes Católicos tenemos que situar en primer lugar, desde el punto de vista honorífico, al Comendador Mayor de Castilla y así se demostraba en las reuniones de la Orden de Calatrava con el asiento principal. En la Edad Media sustituía al Maestre , por su ausencia, al mando del ejército de lanzas de los caballeros de Calatrava y fue frecuente que se promocionase de este cargo al Maestre de la Orden.

Las villas de Abenojar y Agudo estaban asignadas a esta Encomienda. 

La Orden tenía en ellas pleno señorío, salvo en lo referente a los diezmos y a las "minucias" o diezmos "de cosas menudas". A la mesa arzobispal de Toledo correspondía el tercio o "terzuelo" de dichas minucias y diezmos, con la excepción de los del pan y del vino de Agudo, que eran recibidos en su totalidad por el comendador mayor. 

A estos dos núcleos de población se sumaba el de las Chozas, que ya aparece mencionado en la visita de 1491 y que debía depender de la jurisdicción de Abenojar. 

Las fortalezas que tenía en Abenojar y Agudo fueron arruinándose durante la Edad Moderna por su inutilidad1. Esta arquitectura militar fue sustituida por casas de aposento y labor al servicio de la administración, producción y almacenamiento del señorío. 

Además de estas casas o "palacios" la encomienda contaba con una amplia serie de bienes raíces. En termino de Abenojar, las dehesas de Las Fresnedas (Fresneda Alta y Fresneda Baja) se hallaban arrendadas al concejo durante todo el año; este pagaba una renta de 445.000 mrs. por el "invernadero" y 16.993 mrs por el "agostadero". En el mismo término se encontraban la dehesa de La Higueruela -- que la Orden utilizaba durante el invierno --- y las de El Artunero, Las Chozas, El Cañuelo, La Hardosa, La Horma La Campana, El Hornillo, La Majada las Camas, Las Muelas, El Cuadrejon y Valconejuelo. 

En Agudo la encomienda poseía buen número de propiedades: los colmenares de El Corcho, Guindalejo, El Rinconcillo y el Cortimero. La dehesa de Las Trasquiladas, que tenía arrendada al concejo por 20.000 mrs. anuales. Dieciséis molinos "de pan" junto al río, cifra esta proporcionada por el inventario de 1510 y que contrasta notablemente con las obtenidas en los inventarios anteriores (fechados en 1491, 1500 y 1502), según los cuales había un solo molino. Si no se trata de un error, hay que pensar que entre 1491 y 1510 la población de Agudo aumento de forma bastante considerable; esto viene a quedar confirmado por el texto de la visita de 1.500 al concejo, en que se manda entre otras cosas agrandar la iglesia, ya que " ... el pueblo se a mutiplicado e cresçe cadaldia ..", Por estos molinos percibia el comendador mayor una renta anual de 52 gallinas mas el diezmo. Se trataba, como aclara el inventario, de molinos "invernigos" que no podian funcionar en verano dada la precariedad del caudal del rio o arroyo de Agudo. El problema de la escasez de agua parece ser uno de los mas acuciantes para la villa en ese momento. 

La encomienda poseía también en Agudo dos quiñones y una huerta junto al rio, además de una renta de 4.000 mrs. que había de pagar "el termino" posiblemente en reconocimiento del señorio de la Orden (ver las descripciones y relaciones de bienes de la encomienda en: AHN OM, Consejo Visitas, leg 6.109, num. 15, fol. 148, y num.58, folios 60 r-61; leg 6.110 num.4 fols, 161 r-164 y num. 24, folios 199 rº 225 vº) 

La explotación y arrendamiento de las dehesas suponía con seguridad la fuente de ingresos de mayor importancia para la encomienda. Sin embargo, no pueden dejar de tenerse en cuenta los beneficios percibidos por razón de los derechos jurisdiccionales de la Orden en ambos términos: de todos ellos, y de los datos referentes a sus respectivos valores, se ha hecho relación en el esquema correspondiente. 

Hay que mencionar también los derechos ejercidos en otros lugares en virtud de privilegios, donaciones o trueques. Ese es el caso de la exención de portazgo en el puerto de Villaharta para setecientas ovejas de la cabaña de la Orden. Este privilegio fue concedido por Alfonso XI en 1343 y confirmado por sus sucesores, correspondió a la encomienda mayor durante toda la baja edad Media. En 1510 el Comendador no ejercía ya tal derecho, pero percibía como compensación la suma anual de 145.000 mrs, tal vez su equivalente en metálico. Así mismo entre sus propiedades y derechos hay que señalar el portazgo de la villa de Belmez y el heredamiento de Los Cañuelos, en término de Azuaga, con capacidad para 200 fanegas de cereales aproximadamente. 


Según la visita de 1.550 la encomienda rentaba en total 1.121.950 mrs , 755 fanegas de trigo y 329 fanegas de cebada. En los últimos años del siglo XV su valor no era demasiado diferente puesto que se estimó hacia 1497 en 1.142.451 mrs.

Fuentes:

- Emma Solano Ruiz: La Orden de Calatrava en el siglo XV. Los señoríos castellanos de la orden al fin de la Edad media. Sevilla, Universidad, 1978.
- 1En la toma de posesión de la Encomienda Mayor de Castilla se señala la existencia de un castillo perdido, 1729 (AHN, Archivo Uclés, Cajón 86, nº 44).

-AHN - OOMM. Consejo Visitas, leg. 6.109, num. 41, fols., 232 r 239 r.

jueves, 16 de diciembre de 2010

Sobre la Orden de Calatrava (I)

Introducción 






“La Orden de Calatrava, cumplidos los 850 años de su existencia en 2008, fue la primera orden religioso-militar creada en España y una de las primeras en Europa, para defender la cristiandad frente al empuje bélico del islam. Fue fundada en la ciudad-fortaleza de Calatrava en el siglo XII (en 1158), después de que los templarios no se vieran con coraje suficiente para defenderla frente a los ataques musulmanes. El abad Raimundo de Fitero (Navarra) y Diego Velázquez, monje de su monasterio que había sido guerrero en su juventud, se ofrecen voluntarios a Sancho III para hacerse cargo de la fortaleza. La Orden de Calatrava comenzó su andadura en un pequeño territorio hostil y semi despoblado y, en el discurrir de los siglos, sin dejar de guerrear, obtuvo importantes propiedades tanto en extensión como en valor económico. Se expandió por varias zonas de la Península Ibérica, incluso Portugal; su poder e influencia fueron enormes, en especial en el conocido todavía como Campo de Calatrava, y fue tan necesitada como temida por los reyes. 


Fernando el Católico, a finales del siglo XV, decide controlarla y, tras conseguir ser nombrado maestre, la anexiona a la Corona. Desde entonces, los reyes españoles, como grandes maestres, han administrado, vendido o hipotecado los bienes de la orden, desde las minas de Almadén hasta un sinfín de prebendas y de territorios que, en el siglo XIX, fueron definitivamente desamortizados. Hablar de la Orden de Calatrava es recrear el arte cisterciense, revivir la batalla de Las Navas de Tolosa, elegir entre el Pedro I el Cruel o el Justiciero, comprometerse con el partido de la Beltraneja o con el de Isabel, mostrarse tan excesivo como el condeduque de Olivares, o saber que, en la actualidad, es don Juan Carlos I quien ostenta la categoría de gran maestre de las Órdenes de Santiago, Calatrava, Alcántara y Montesa”


Organización 

El Maestrazgo 

El Maestre aparece como la máxima autoridad de la Orden en los planos espiritual y temporal, y en lo espiritual venía a ser como un abad. Sito en Almagro.

La Encomienda Mayor 
Era la segunda dignidad dentro de la Orden y se proveía por votación en el Capítulo general presidido por el maestre; así , el sistema a seguir era el mismo que para la primera jerarquía. 

Las rentas correspondientes al cargo eran fundamentalmente las de las villas de Agudo y Abenojar, Osuna (permutada en 1464 por FuenteOvejuna y Belzmez) y ciertos derechos en el puerto de Villaharta. 

El comendador mayor actuaba como lugarteniente del maestre durante su ausencia, asumía el gobierno de la orden cuando se hallaba vacante el maestrazgo y convocaba a capítulo para la elección de sucesor en dicho cargo; además, parece que debía acudir a todas las empresas de la corona contra el Islam como capitán de las 300 lanzas que la Orden estaba obligada a aportar. 

Sobre el reclutamiento hay que añadir que todas las encomiendas, inclusive la mayor y las de otras jerarquías de la Orden, debían tener dispuesto para acudir en servicio del maestre un número de lanceros o "lanzas" calculado, aunque no siempre, en relación con el valor de sus rentas anuales. El repartimiento o cálculo del numero de hombres exigible a cada comendador se hacía periódicamente, sin que ello coincidiera con los momentos de guerra; por lo menos así parece a que se deduce de varios libros de visita de los primeros años del siglo XVIl 

En 1493, el numero de hombres armados que debieron aportar las encomiendas fue de 293, cifra que en 1511 descendió ligeramente a la de 276.

La contribución de la Encomienda Mayor fue: de 60 hombres en el año 1493 y de 33 en 1511.

Parece ser que muchas poblaciones conseguían eludir estos servicios militares mediante el pago de tributos, como el de “los peones”.

La Clavería 

El clavero era el encargado de la guarda del castillo y Convento de Calatrava. En ausencia del comendador mayor debía sumir sus funciones.

La Subclavería 

Venía a ser un el lugarteniente del clavero, con funciones equivalentes a las del comendador mayor respecto al maestre.

La Obrería 

La misión del obrero era ocuparse de las obras y reparaciones necesarias en el castillo convento de Calatrava y aportar los medios económicos para ello. Según Rades, esta dignidad tenía sus bienes y rentas en las proximidades del convento y en la villa de Argamansilla.

Las Encomiendas 

Los caballeros que no desempeñaban ninguno de los cargos anteriormente descritos , recibían por lo general la administración de una o varias villas o lugares del señorío de la Orden con sus rentas y derechos, esto es , una encomienda. 

A mediados del siglo XV existían unas sesenta encomiendas, repartidas en tres partidos o provincias: Campo de Calatrava, Zorita y Andalucía sin contar con las situadas en el reino de Aragón. 


Organizacion Territorial 

Ver entrada anterior Orden de Calatrava – Poblamiento 

En el siglo XVI, la Orden de Calatrava se encuentra organizada en tres partidos, y el primero se encontraba dividido en otros tres a su vez. el Partido del Campo de Calatrava, Almodovar y Almadén, el Partido de Andalucía y el Partido de Zorita. También tenía otros bienes no sujetos a los partidos como los señoríos en la Corona de Aragón y Reino de Valencia, y otros. 

El Partido del Campo de Calatrava, Almodovar y Almadén tenía un gobernador principal en Almagro, así como un Prior-Vicario eclesiástico. Las encomiendas eran 30 y de ellas se enajenaron cinco ( Guadalerza, Malagón y Porzuna, Piedrabuena, El Viso y Santa Gruz de Mudela, Villarrubia).


Mapa del Campo de Calatrava de Tomás Lopez, 1785


Fuentes:

- Jesús de las Heras, : “La Orden de Calatrava. Religión, guerra y negocio”, Editorial EDAF , 2008.
- Cartografía en el Siglo XVIII: Tomás López en la Real Academia de la Historia. Escrito por Antonio López Gómez y Carmen Mansó Porto

viernes, 10 de diciembre de 2010

Breves: Sobre como iban vestidos algunos a la Iglesia en 1717

"En la Villa de Agudo, en tres de Abril de 1717, el señor Licenciado Don Eulogio Gonzalez de Córdoba, visitador general, dijo que se le han dado noticias que algunos vecinos de esta villa entran en la Parroquia a oir misa y asistir a los oficios diurnos con Garbinetas blancas y negras, bolsas y con el pelo atado y trajes indecentes y poco prudentes para sitio tan sagrado causando gran escándalo". Para terminar con esta situación y poner remedio "mando  que ninguna persona entre en dicha Parroquia ni otra de esta Villa durante los oficios diurnos con dichos trajes" .
La pena era la Excomunión.

Breves: Ermita de Santa Ana

Tenemos muy pocas referencias de esta ermita, ya extinta.
En el libro de Defunciones de la Parroquia de San Benito, aparece registrado el 21 de Mayo de 1752 un  suceso que acabó en tragedia. Se trataba de Manuel Cerrillo, vdo. de María Romero "el cual viniendo por el camino que iba de esta villa a la Hermita de Ntra. Sra. de Santa Ana, la tarde del día inmediato antecedente súbitamente cayó un rayo y le mató en el sitio que llaman el cerro Postuelo".


lunes, 29 de noviembre de 2010

Esclavos en Agudo S.XVI y XVII

La esclavitud durante el periodo medieval está ligada a la pugna cristiano-musulmana, los cristianos son esclavizados por los musulmanes y éstos por los cristianos. Esto también constituye una vía para la entrada de los negros como esclavos en España, ya que eran una fuerza militar o esclavos en la sociedad civil.

Durante el siglo XVI la esclavitud estaba ligada en las Indias con la explotación económica, y en Castilla  se presenta como algo exótico, como una muestra de riqueza de sus propietarios, y no se relaciona, en general, a los esclavos con trabajos concretos y si con que su actividad se realizaba en el ámbito doméstico de sus propietarios.

La abundancia de esclavos durante ese periodo hay que ubicarla dentro de un contexto de expansión demográfica y económica, siendo la frontera de Portugal la principal vía de entrada, sobre todo a raíz de su anexión a la Monarquía Hispánica en 1581. Pero los portugueses no fueron los únicos que aportaron mano de obra esclava, también aparecen esclavos proporcionados por las victorias militares en el Mediterráneo y los moriscos esclavizados como consecuencia del levantamiento de las Alpujarras  (1569-1571).

Los esclavos formaban parte de una minoría marginada de la población, donde no aparecen mencionados en censos ni padrones, y solo aparecen documentados en algunas fuentes como son las fuentes notariales (escrituras de venta y poderes para vender esclavos, testamentos, dotes, inventarios ...) .Estos documentos son vitales para entender como se desarrollaba el tráfico de esclavos, pues nos ofrecen datos relativos a compradores y vendedores: sus nombres, vecindad y a veces su profesión; también presentan descripciones físicas de los sujetos como son sexo, edad, color de la piel, procedencia.. También se puede conocer el precio alcanzado por la compra-venta del esclavo.

En los testamentos, los esclavos suelen aparecer registrados entre las posesiones del otorgante, determinando su destino tras la muerte de su propietario. Así son legados a parientes o se les concede la libertad de forma total o condicionada.

Las fuentes eclesiásticas constituyen otra fuente de estudio, a través de los libros sacramentales, como es el caso de Agudo, donde relataré los esclavos que he visto registrados en los libros de Bautismos y Defunciones (hasta el momento).

También están las fuentes jurídicas ,las fuentes inquisitoriales y las fuentes municipales.

Parece ser que en la zona meridional de Extremadura y Campo de Calatrava, estuvo extendido el empleo de mano de obra esclava para todo tipo de faenas, tanto las domésticas como las agropecuarias.

Según algunos autores, las esclavas era poseídas, en numerosas ocasiones, para ser nodrizas de los hijos de sus dueños, circunstancia que requería el que se quedaran preñadas con algunos meses de antelación a sus respectivas propietarias para que cuando naciera el hijo de estas ellas pudieran proporcionar la lactancia desde el mismo momento de su nacimiento. Hecho que se aprecia con el nacimiento de un hijo de Gonzalo Rodriguez y de su mujer Isabel Muñoz en 1608. 

Otros autores también creen que el propietario hacía uso biológico de la esclava para obtener nuevos esclavos. Los esclavos que aparecen en los libros de Bautismos y Defunciones desde 1553 a 1630 son los siguientes: 

Propietario Esclavo Madre Esclava Año
Andrés García Redondo Inés
Juan
Isabel
Catalina
1553
1570
Álvaro Pizarro Francisco Agudo
1556*
Bachiller Yegros Juan (liberado en 1581) Isabel 1561
Licenciado Fuentes Juan Catalina 1561
Bartolomé Luengo María
Catalina
Ana
1565
1574
Gonzalo Muñoz de Carvajal, Gobernador de la Villa Isabel Inés 1570
Juan de Villareal Baltasar
Gaspar
criado 1572
1574
Padre Pedro Gómez Juan Catalina 1573
Aparicio Martín Luengo Miguel
Isabel

1573
1577
Juan Lorencio María criada 1575
Pedro Mellado María
Juan
Inés
1575
1578
?? María
1575
Bachiller Pizarro Alonso María Alonso, Criada 1577
Padre Prior Juan Isabel 1584
Juan Luengo Alonso Catalina, criada 1587
Antonio ??? María
1591
Bachiller Francisco García Madroñero, clérigo María María de Quintana 1596
Gonzalo Rodriguez , Portugués Bernardo
Agustina
Maria
María
Felipa Madera

Felipa Madera
1608
1610
1611
1618
Andrés Camacho Camarero María Morena
Juan
Lorencio, Sebastian y Francisca
Francisca
1605
1609
Vecindario 1610
Francisco Serrano Juan, Diego, María
María
Jacinta

Vecindario 1610
1619 - † 1637
1610 - † 1639
Álvaro Núñez María
Vecindario 1610
Martín Sevillano María Felipa Madera * 1611
Doctor Juan de Yegros y Doña Catalina su mujer Isabel y Antonia
María
Juan

Antonia
Vecindario 1610
1613
1616
Doña Beatriz, viuda Doctor Alonso Luengo Juan Francisca 1615
Pedro Sánchez Camarero Pedro
Vecindario 1619
Álvaro Pizarro Juan Latino
† 1626
Juan del Burgo Catalina, Antonio
Inés
Sebastián

Lucrecia
   
Vecindario 1619
1628 - † 1629
† 1629


Los propietarios solían ser clérigos, hijosdalgo y personas relevantes (Doctores, mercaderes..)

Destacan las madres : Francisca, Isabel ,Catalina y Felipa Madera. En otros no tenemos el nombre de la madre, pero Felipa Madera es la madre de los tres esclavos de Gonzalo Rodriguez y de otro de Martín Sevillano.

En el caso de Alvaro Pizarro, ya aparece en 1556 como propietario de Francisco Agudo, y más tarde, un descendiente suyo es el propietario de Juan Latino.

He dejado varios casos de hijos de criados que podrían ser también esclavos.

Procedencia y raza

No sabemos la raza ,ya que este dato no aparece en los registros que he consultado. Los denominados esclavos blancos eran , en general, musulmanes, entre los que se contaron muchos moriscos granadinos tras la guerra de las Alpujarras. Muchos de ellos recuperaron su libertad tras pagar un rescate; también se dio el caso de moriscos que se ofrecieron a los castellanos como esclavos para no someterse a la expulsión de 1610.  En Extremadura la mayor parte de los esclavos que se han estudiado durante la Edad Moderna son descritos como negros, tintos, retintos, atezados, prietos... diferentes adjetivos que denotan el color oscuro de la piel de estas personas. Y esto nos lleva a relacionarlos con una procedencia africana, y la relación con los portugueses como abastecedores del mercado esclavista.
También están los negros originarios de América, que posiblemente llegaron a la Península acompañando a sus amos.

Luego, les seguirían en número los mulatos, con sinónimos como pardo, bazo, loro, trigueño, y la expresión más conocida "membrillo cocho " o "membrillo cocido", categoría donde entraban esclavos indios o berberiscos del norte de África. Pero sin duda, entre los esclavos mulatos predominan los nacidos en tierras peninsulares, bien en Portugal o en Castilla, así vemos en los registros "de nación portugués".

De igual forma que los niños libres, los nacidos de esclavas eran bautizados a los pocos días de su alumbramiento y pasaban a ser inscritos en los libros parroquiales; una inscripción que se convertía en un certificado de posesión para su dueño.  De ahí la importancia de los datos obtenidos de las Parroquias para conocer el comportamiento de la demografía esclava.

La mayoría de las anotaciones que corresponden con hijos de esclava no suelen contener referencias acerca del padre. Así, mientras que el párroco indica que el niño es esclavo o que lo es su madre, no ocurre lo mismo con el nombre de los padres, siendo omitido.  El esclavo bautizado suele mantener su condición de ilegítimo.

Zafra, constituyó el mercado de esclavos extremeño más importante durante la Edad Moderna. Durante la festividad de San Miguel, se celebraba una feria donde se distribuía la mercancía esclava, llegada principalmente de Portugal. Los principales mercaderes procedían de Lisboa, Olivenza y Montemor , y luego de Helvas, Estremoz y Vila Viçosa (a excepción de Lisboa, todas del Alentejo).
Aquí están registrados esclavos que se vendieron con destino a Agudo. 

Es destacable el hecho, que el principal propietario de esclavos en  Agudo, fuera un Portugués, Gonzalo Rodriguez.

Los esclavos fugitivos y su recuperación 

En el Archivo General de Navarra en los años 1548-1566 aparecen una serie de datos interesantes sobre la detención y encarcelamiento en las cárceles reales de Pamplona, de una serie de esclavos procedentes de toda la geografía española, y estuvieron retenidos allí mientras se daba un aviso a sus amos. Entre los casos que figuran, está Francisco Agudo, esclavo de Alvaro Pizarro, vecino de la Villa de Agudo. 

Según María Isabel Ostalaza Elizondo, llama la atención la ruta elegida de los fugados encaminada al reino de Navarra, cuando lo normal hubiera sido buscando cruzar el estrecho de Gibraltar. Esta elección estaba meditada, ya que los fugados intentaban llegar a Francia que tenía un tratado con el Imperio Turco para repatriar a los prisioneros de ambas partes. 

Cuando un fugado era detenido, generalmente se negaba a facilitar datos de su procedencia o de su dueño, por lo que pasaban varios meses, hasta que el verdugo conseguía obtener los datos, y empezaba entonces el proceso de retorno. Algunos llegaron a enfermar en este proceso, como es el caso de Francisco Agudo, que “tras 52 días de encarcelamiento, se le llevó al hospital desta ciudad a curarle”.. 

Integración social

Los libertos dejaron una huella documental escasa, lo que  dificulta conocer como se adaptaron a su nueva condición de individuos libres. Fundamentalmente se conocen por algunos testamentos.
Se piensa, en gran medida, que las posibilidades de integración de estas personas dependerían de diversas circunstancias, entre las que se encontraban los recursos con los que contasen. Recursos proporcionados por sus antiguos propietarios como donaciones o pagarles el aprendizaje de un oficio.

He encontrado una única liberada, en 1589, hija de Blas y de Catalina López.


Actualizado: el 14 de Octubre de 2011

Fuentes: 

- Gómez Vozmediano, M.F.: Mudéjares y moriscos en el Campo de Calatrava (s. XV-XVIII): espacios de convivencia, tiempos de intolerancia, Diputación Provincial de Ciudad Real , Año 2000.
- Ballesteros Diez, Jose Antonio: Esclavitud en la Extremadura del siglo XVI, 2005-2006
- Ostalaza Elizondo, María Isabel.: La Esclavitrud en los reinos hispánicos a lo largo del siglo XVI, en Popupulation & Démographie au Moyen Âge
- Periañez Gómez, Rocío: La esclavitud en Extremadura (Siglos XVI-XVIII), Tesis doctoral, Cáceres 2008.